El pasado
mes de agosto visité Canfranc Estación (Huesca) ¡qué ganas tenía de ir!
Me
hubiese gustado subir en el canfranero (tren que hace el recorrido, en mi caso, desde Sabiñanigo hasta Canfranc Estación) ya que el recorrido del tren
es precioso, pero los horarios eran incompatibles con las visitas a la estación,
así que tocó ir en coche.
Vista general de la Estación Internacional de Canfranc (Huesca) |
Ha estado
muchos años sin poderse visitar (me parece que entre 9 y 10) y de nuevo han
abierto las puertas para que todos podamos disfrutar de esta maravilla y
descubrir una parte de su historia, que es increíble.
Majestuosa imagen de la estación internacional de Canfranc que te hace rememorar años pasados |
Actualmente se quiere rehabilitar y dar diversos usos para fomentar el turismo aunque de momento va poco a poco.
Pues vamos a entrar!!!
Dentro de la estación, es obligatorio el uso de caso, ya que su estado de conservación no es el deseado debido, entre otras cosas, a los robos que ha sufrido, a actos vandálicos... y actualmente se está rehabilitando.
Os recomiendo que reservéis la visita en la oficina de turismo, el precio es barato y las explicaciones os harán querer saber más sobre lo que se vivió allí años atrás.
Una vez pasado el túnel subterráneo que cruza bajo tierra los andenes, llegamos a la escalera que da acceso al interior de la estación.
A pesar del deterioro y gracias a la explicaciones de la guía, así como vídeos y paneles informativos, consigues imaginar la grandiosidad y esplendor del que debió lucir en su momento.
El material empleado deja entrever el lujo de la estación: mármol, madera... ventanales...
Os recomiendo que reservéis la visita en la oficina de turismo, el precio es barato y las explicaciones os harán querer saber más sobre lo que se vivió allí años atrás.
Una vez pasado el túnel subterráneo que cruza bajo tierra los andenes, llegamos a la escalera que da acceso al interior de la estación.
El paso subterráneo cuyos materiales nada tenían que ver con el empleado en la estación. |
A pesar del deterioro y gracias a la explicaciones de la guía, así como vídeos y paneles informativos, consigues imaginar la grandiosidad y esplendor del que debió lucir en su momento.
El material empleado deja entrever el lujo de la estación: mármol, madera... ventanales...
Aún se pueden observar los escudos de las dos naciones: España y Francia, cada uno en una pared de la estación. |
Pero hagamos un breve recorrido histórico para situar esta estación tan importante.
La idea de un enlace ferroviario con Francia a través del Pirineo Central surgió por primera vez en 1853. Pero fue en 1864 cuando desde España se envía una delegación a París para tratar con el gobierno galo el tema de los pasos transpirenaicos.
La construcción del ferrocarril de Canfranc no deja de ser una gesta que, con interrupciones y retrasos, se alargó durante 75 años. Dimes y diretes entre políticos de España y Francia impedían una y otra vez abordar el proyecto.
En el transcurso de la II Guerra Mundial, la estación ferroviaria internacional de Canfranc llegó a convertirse en un punto estratégico, una Casablanca pirenaica por la que pasaron espías de la Resistencia francesa, judíos que huían de las SS y toneladas de oro del expolio nazi.
El túnel de Canfranc se comenzó el 1 de enero de 1909 terminando el 21 de febrero de 1915. El edificio de la Estación, en cuya construcción se invirtieron tres años y medio, quedó terminado en enero de 1925.
"Cuando quede terminada la línea de ferrocarril de Canfranc, los viajeros de París a Madrid ganarán cuatro horas en el recorrido y harán una travesía montañosa, que será uno de los espectáculos más hermosos y deslumbrantes de nuestro viejo continente" Le Matin, 1928
La Estación de Canfranc es el fruto de la aplicación de los avances y conocimientos técnicos de su época, presentando interesantes innovaciones constructivas como es el empleo del hormigón armado en su estructura. Su construcción exigió grandes obras, modelar las laderas de la explanada de la estación para la protección de aludes, plantación de 2.5 millones de árboles (en su mayoría pinos silvestres) paras frenar la erosión y evitar riesgo de aludes y avalanchas de nieve ...
Cuentan las crónicas que un radiante 18 de julio de 1928, el rey Alfonso XIII y el Presidente de la República Francesa Gastón Doumergue inauguraban la línea en la Estación Internacional. Se ofreció un banquete en lo que posteriormente sería el servicio postal, para 300 invitados. Alfonso XIII declaró en el brindis "los Pirineos ya no existirán más" y comenzaron a hablar de tráficos de naranjas y enlaces directos Madrid-París.
Detalle de algunas de sus 365 ventanas que albergaban el Gran Hotel, Hospital... |
Pero al "Titanic de la montaña" tal y como se le publicitó en su tiempo, no le acompaño la suerte: la depresión económica mundial de 1929, el periodo entreguerras, la Guerra Civil, la II Guerra Mundial, la depresión de la postguerra... desprendimientos... falta de mantenimiento... hasta que finalmente, en 1970 un "oportuno accidente", provocó que se cerrase el tráfico internacional tras el derrumbe del puente de L'Estanguet fruto del descarrilamiento de un tren de mercancías francés. Algo que interesaba a Francia ya que no quería seguir con el mantenimiento de ésta.
La Estación de Canfranc guarda en su pasado episodios de contraespionaje, la presencia de las SS y la Gestapo, la ruta del oro nazi, la puerta de fuga de muchos judíos y hasta de los alemanes perdedores... todos debían convivir en un pequeño pueblo de montaña donde a veces no se sabía si quien se tenía delante era ciertamente quién decía ser. De hecho tenemos grandes historias como las del francés Albert Le Lay que arriesgando su vida y la de su propia familia, dio ayuda para pasar de Francia a España, engañando así a los alemanes. Héroes que daban su vida.
Durante la Guerra Civil, la estación pasó a ser controlada por el Ejército franquista, siendo tapiado el túnel que la unía con Francia para evitar cualquier tipo de penetración desde el país vecino. Entre 1940 y 1944, la Segunda Guerra Mundial supuso su cierre al tráfico de viajeros y la llegada del ejército nazi a la parte francesa de la estación, controlando así Alemania la aduana internacional de Canfranc con un grupo de oficiales de las SS y miembros de la Gestapo (que residían en el hotel de la estación jy en otro del pueblo).
Detalle de la fachada del túnel de Somport |
A medida que te acercas a la boca del túnel es increíble el frío que comienzas a sentir. Un congelador gigante!!! |
La oscuridad del túnel impresiona |
Detalle de lo que en su día formaba parte de la vida ferroviaria de la estación |
Detalles congelados en el tiempo |
Su procedencia debía de ser doble: los bancos nacionales de países ocupados por los nazis, como Holanda y Bélgica, y, muy probablemente, los campos de concentración alemanes. Una vez robado el oro, lo “lavaban” en Suiza y a cambio recibían divisas.
Sin embargo, en 1970 un oportuno accidente hizo que Francia se desentendiese del mantenimiento de la línea.
Lo que queda de aquello que en su día formaba parte del día a día de los trenes, de su mantenimiento... |
Entre el recuerdo de lo que fue una gran estación y el abandono de sus vagones, raíles....
Vías que ya no llevan a ninguna parte... o quizá nos llevan hacia el pasado...
La nostalgia de viajeros que viajaron en sus vagones con historias diferentes, orígenes diversos... sueños por cumplir...
Camino a....
Cruce de caminos de quienes huían, quienes viajaban...
Como una postal del pasado...
Paseando por una estación del ayer |
CANFRANC
EL REY DE CANFRANC (tráiler documental)
Ente las muchas intrahistorias de la Segunda Guerra Mundial, la del francés Albert Le Lay es una de las más peculiares y emocionantes. Un personaje que parecería casi de ficción. Fué jefe de aduana francés en la estación internacional de Canfranc durante la guerra y al mismo tiempo espía al servicio de la Resistencia. Ayudó a que la frontera fuera un coladero de información y de refugiados del nazismo contribuyendo a que cientos de judios... disidentes... lograran pasar la frontera española camino de la libertad.
JUEGO DE ESPIAS
LABORATORIO
SUBTERRÁNEO EN CANFRANC (TUNEL SOMPORT)
¿Qué investigan en el laboratorio subterráneo de Canfranc?
Para los peques, Tadeo también hace mención a este laboratorio: “Descubre con Tadeo” :
Un poco de una historia quizá desconocida para muchos
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