El paisaje que nos ofrece la costa vasco francesa es realmente precioso. Cualquier pueblo en el que paras te regala a la vista un contraste de color del que no se puede escapar. El verde llega a pie de playa, el mar tan azul, el contraste entre ocio y pesca en los puertos...
Socoa, en San Juan de Luz (Francia) es un pueblo precioso, tranquilo, con una belleza y unos contrastes que hace que disfrutes paseando por su puerto, por sus calles...
El detalle de un reflejo, la tranquilidad de una gaviota...
"Las gemelas" de Hendaya nos acompañan en nuestro viaje, tan visibles desde la costa...
Faros que vigilan el mar y guían a los pescadores en su duro trabajo y más en este mar tan bravo.
Las playas, con sus pueblos tan auténticos que miran al mar y nos ofrecen una postal única: montaña, pueblo y mar.
San Juan de Luz (Francia), Donibane, es una preciosa bahía que nos ofrece la comodidad de disfrutar de un día de playa y combinarlo con perderse entre sus calles, visitar sus comercios, admirar sus edificios ...
Siempre alertas al mar.. los vigilantes de la playa...
El mar... siempre invitándonos a entrar, ya sea para disfrutar, para trabajar o para sentir su frescor...
Siempre alerta esperando y vigalando a nuestros "arrantzales" para que vuelvan a casa después de su duro día de trabajo.
El día acaba, el sol nos regala los últimos rayos y a veces nos pilla tan desprevenidos que no nos da tiempo ni de sacar la cámara para inmortalizar el momento.
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