Noche de Light-Painting II

Nuestra noche mágica de luz y fotografía tuvo sus descansos para reponer fuerzas y entrar en calorcito. Entre todos compartimos risas, anécdotas... y luego trabajamos más light-painting pero en el interior de la masía.

¡Increíble lo que se llega a conseguir!

Ahora... todos a la caja de escaleras a fotografiar... una papelera en mitad de la oscuridad. Sí sí... aunque no lo parezca. Yo no estaba bien situada pero aún así el efecto conseguido por los barrotes de la escalera no me disgustan.

 ¿Quién diría que esto es la papelera cayendo por las escaleras?

Y ahora... ¿qué podemos hacer? 

¡¡¡¡ Atención  !!!! Se nos ha colado un ovni en la masía

Un ovillo... un ovni....?¿?¿? a mi me encanta

Cambiamos de zona y dejamos las escaleras. Nos situamos en una habitación y a disfrutar haciendo girar las luces.

Y esto... ¿qué es? pues una moto con luces que caminaba sola (un juguete del peque de una de las compis del grupo).

Y a mí estas me encantan. Me parecen como veleros surcando el mar... y ¿si supierais cómo están hechas?

Una técnica totalmente diferente, muy divertida para hacer en grupo y conseguir efectos diferentes. Ya sé que muchos pensarán que esto se puede hacer con Photoshop, sí, ¡cómo tantas cosas! pero sin embargo la satisfacción de hacerlo tú misma, de imaginar qué saldrá, inventar cómo conseguir nuevos efectos... en fin, que aunque la foto no salga perfecta, para mí es como magia y lo mejor es que tú lo has hecho y probablemente irrepetible porque aunque la intentarías hacer otra vez igual seguro que salía algo diferente.

Noche de Light-Painting I

El pasado sábado 23 disfruté de un nuevo taller con Isa Herrera (gran fotógrafa y amiga). Disfrutamos un buen grupo de amantes de la fotografía de un noche aprendiendo la técnica de Light-Painting (dibujando con la luz).

Nos reunimos en una masía en Vilanova i La Geltrú a las 20:30 horas y a disfrutar toda la noche del frío, de la compañía, de la imaginación de Isa para intentar hacer maravillosas fotografías, de las risas...

Para esta técnica solo necesitamos trabajar en modo manual con la cámara y un tiempo de exposición largo (por lo que al trabajar en BULB, necesitamos disparador). ¿El material? todo aquello que se nos ocurra y que emita luz: linternas, luces led, juguetes luminosos, bengalas...

Aquí van las imágenes a ver qué os parecen. Como costumbre en mi blog, las fotos están tal cual salieron (alguna recortada), sin retoques porque mejor o peor me gusta quedarme con lo que fui capaz de sacar con mi cámara. Además, creo que no me quedaría bien así que aquí os lo dejo.

Comenzamos a calentar motores. Al fondo está Cubelles iluminado y tras estás luces nuestro compi Lluis que nos ayudó a hacer las fotos porque alguien tiene que hacer de modelo, no? las luces no se sujetan solas (jijiji)

No hubiera estado mal hacer un corazón. Y aquí tenemos la prueba de cómo hicimos trabajar a Lluis ¡mil gracias!

 El efecto de las chispas en increíble

Debido a mi posición al hacer las fotos, no podía captar a la vez el efecto de las chispas del fuego y la iluminación del silo que Isa se encargaba de hacer con una linterna. Por esto tuve que hacer dos fotos, primero centrada en el fuego y cuando quedaban las últimas chispas antes de apagarse captaba ya el fondo. Y ésta es la segunda foto conseguida. 

Jugando con más luces buscando el efecto de esferas.

Y ahora vamos a disfrutar de unos juegos de luz en color rojo que para mi son increíbles las formas que  han salido.

¿No os recuerda a un corazón? Y pensar que estábamos en mitad del campo, con un frío... y allí jugando con  luces... y como por arte de magia... después de una larga exposición y de tener pies y manos como el hielo... ¡nos aparecen estas imágenes en la pantalla de la cámara? 

No es pintura sobre un lienzo negro, ni mucho menos. Aunque no  lo parezca, estamos en mitad del campo, de madrugada, jugando con luces... la exposición larga y un buen ajuste de Iso así como una correcta abertura del diafragma, hacen que salgan estas fotos. 

 Parece una bailarina, ¿vedad?

Esta foto dedicada a mis princesitas para que con su piano y violín escriban las notas de este pentagrama de luz y color.

La Cuniacha en otoño

1 de noviembre... cita en el Pirineo... en pleno otoño.... para mí una de las estaciones del año más bonitas para fotografiar y pasear entre bosques, sentir las hojas secas al ser pisadas, disfrutar de las maravillosas tonalidades que pintan el paisaje, los atardeceres... Motivos más que suficientes para hacer otra visita a uno de los rincones del Pirineo Aragonés preferidos por mi para caminar, para disfrutar con niños, para admirar la belleza de la naturaleza, de los animales...  creo que ya os imagináis que hablo de La Cuniacha (Piedrafita de Jaca - Huesca-).

Nada más llegar nos encontramos con los bellos colores del otoño reflejados en las hojas de sus árboles, una gran amplia de colores ocres, rojizos, verdes... que sería la envidia de la paleta de cualquier pintor.

Aunque el día no es de los mas bellos en cuanto a luz, ya que teníamos un cielo blanco... no me quejo, yo igualmente disfruté y las fotos... pues vosotros diréis si os gustan.

Comenzamos nuestro paseo otoñal en la mejor de las compañías posible: los amigos. Aquellos que siempre están, más cerca o más lejos pero siempre ahí.

Comenzamos nuestro recorrido siempre atentos a lo que podemos ir encontrándonos, a oír diferentes aves... a distinguir entre variedad de árboles y arbustos... Hemos llegado algo tarde y ya han dado de comer a los buitres así que nos quedamos sin ver a estos grandiosos animales. Aún así hay muy por disfrutar y a medida que nos vamos adentrando por el bosque comenzamos a ver los primeros animales.

Y nuestras princesas entusiasmadas al ver ¡un "bambi"!!!

Una mirada penetrante... como diciendo ¡aquí estoy yo! Bellísimo

Y las princesitas esperando a que sus amigos "los bambis" pasasen cerca de ellas

Y toda paciente espera tiene su recompensa

Seguimos nuestro camino disfrutando de este maravilloso entorno.

Y llegamos a la zona de los linces. Realmente imponen y son de una belleza cautivadora. He de reconocer que esquivar las mallas que les rodean es complicado (y a veces es más difícil esquivar a "fotógrafos rivales" .... niños haciendo de las suyas...) pero algo pude hacer. Iré perfeccionando en futuras visitas.

Son realmente fascinantes

No os engañaré, su mirada intima cuando estás tan cerca.

Parece que sabe que estoy allí haciéndole fotografías. Espero que no le importe...

No me digáis que no tiene una mirada impresionante

No conseguí esquivar la malla ante la premisa de captar el momento.

Tras nuestro descanso comiendo en la zona pic-nic habilitada para ello en la zona próxima a los linces, seguimos con nuestro paseo. Y las peques van contándose sus cosas... se han buscado "piedra-móviles" y están encantadas jugando con una piedra y un palo, y lo mejor es que tienen hasta WhatsApp, Internet, cámara fotográfica... y nosotros comprando Iphone!!!! ¡Son extraordinarias! 

Durante el recorrido podemos ver comederos para los animales.

Los lobos siguen siendo la asignatura pendiente, fotográficamente hablando, ya que son muy esquivos y suelen estar a bastante distancia.

Y ya nos vamos del parque... ¡Un gran día! Las pequeñas han disfrutado muchísimo viendo los animales, caminando por el bosque... buscando hojas... y ni se han enterado de lo que caminaban. Y los mayores también hemos disfrutado del mágico entorno de La Cuniacha y de la extraordinaria compañía.